Enfermos mentales desamparados de la sociedad y la dignidad

Tener alguna enfermedad mental es un problema agobiante, más común de lo que podemos apreciar. Pero la situación se complica para los que además de sus facultades mentales no cuentan con el amparo de una familia o la sociedad.
Mirada pérdida, sin aparente esperanza. Juan es uno de nuestros enfermos mentales vagabundos.
En cualquier esquina, en cualquier avenida del polígono central de Santo Domingo es fácil verle.
Su diagnostico, como la mayoría de las personas en igual situación es esquizofrenia.
Los enfermos mentales que pululan por las calles son una muestra de un problema que supera la capacidad de respuesta del Ministerio de Salud Pública.
El costo social es mayor que el impacto económico.

La calle, en la mayoría de los casos, agrava el problema, junto a las carencias económicas e impotencia familiar.
No existen estadísticas sobre la cantidad de enfermos mentales sin atención en las calles del país, pero si está claro que se trata de una problemática no exclusiva de República Dominicana.
Contrario a la percepción la mayoría no son violentos.
Actualmente del presupuesto sanitario del país sólo el 0.50 por ciento es dedicado a la salud mental y existen dos siquiatras por cada 100 mil habitantes.
Estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) establecen que una de cada cuatro personas en el mundo padecen algún tipo de trastorno mental a lo largo de su vida, el informe resalta además, que este tipo de enfermedades son responsables del 8,8% y el 16,6% de las dolencias en los países de ingresos bajos y medios, como es el caso de República Dominicana.
Si usted entiende que un enfermo mental de la calle es peligroso, existe la línea de de auxilio 809-544-4223, pero antes de llamar, tenga en cuenta que sólo en los casos extremos el paciente es sacado del entorno común.

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