miércoles, mayo 09, 2012
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Especialistas del área médica consideran que la prevención y reducción de la mortalidad materna en el país debe implicar acciones dirigidas a mejorar la salud de la mujer desde antes de la concepción, garantizar una atención más especializada y dedicada en los hospitales y a crear mayor conciencia en la mujer sobre la importancia del chequeo prenatal temprano.
Sugieren que el país ponga en práctica una iniciativa que ha dado buenos resultados en otras naciones que es la formación de enfermeras- obstetras para trabajar en los hospitales de maternidad.
Para la representante local de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), doctora Lilian Reneau-Vernon, el fenómeno de la mortalidad materna va más allá que la atención del parto, ya que el cuidado de la salud de la mujer debe empezar desde mucho antes de la concepción, para cuando se embarace esté en condiciones físicas ópticas.
En la prevención, afirma, participa una cadena de cosas, entre las que cita que el hospital cuente con todas las herramientas necesarias, entre ellas, sangre segura disponible y personal calificado, y puso como ejemplo países donde existen enfermeras-obstetras.
Recuerda que un porcentaje de las muertes están relacionadas a la red de servicios del sistema, que debe tener capacidad de detectar el riesgo en una embarazada y enfrentarlo, reenviándola tempranamente a un nivel más avanzado.
Destacó que en la región la tendencia es ir disminuyendo la mortalidad materna debido al mejoramiento del acceso a los servicios y de la educación de la madre. “En algunos países esa tendencia aún es baja, y son los que requieren mayor esfuerzo”.
A su vez, Erick Rouselin, consultor de Salud Familiar y Comunitaria de la OPS, recuerda que las estadísticas hablan de que el 80% de los partos transcurren normal, y que sólo el 20% de los embarazos es de alto riesgo. “Entonces ese 20 por ciento debe pasar a otro nivel de atención especializado”.
Atención profesionalPara el presidente de la Sociedad Dominicana de Ginecología y Obstetricia, doctor Ruddy Rafael Guerrero, las altas tasas de mortalidad materna que tiene el país sólo podrán reducirse cuando se logre una mejor atención al parto dentro de los hospitales y un mejor segui- miento prenatal. El especialista ve que resulta contradictorio que el país tenga tan altos índices de mortalidad materna, cuando a diferencia de otros países, prácticamente la totalidad de los partos se realizan en hospitales.
“No se justifica una mortalidad tan alta, porque en honor a la verdad hay que reconocer que los hospitales cuentan con las herramientas indispensables para atender un parto”, señala.
Sugiere que en el país se trabaje en la formación de enfermeras-obstetras y que la mujer tenga un mejor seguimiento pre natal y educación para que acuda al médico desde el inicio del embarazo.
Entiende que el problema radica en que los partos deben ser atendidos por profesionales, lo cual muchas veces no se da, pese a la gran cantidad de médicos que hay nombrados en los hospitales.
En torno a los trastornos hipertensivos del embarazo dijo que no existen razones específicas que permitan establecer las causas, pero que las complicaciones se pueden evitar con un adecuado seguimiento del embarazo.
Aseguró que se hacen talleres concientizando a los médicos al respecto, y que en los hospitales se cumplen protocolos y normas, pero todavía los índices son muy altos.
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LA PREECLAMPSIA SUPERA LAS INFECCIONES
Las causas de complicaciones en el parto se vinculan a preeclampsia o trastornos hipertensivos, hemorragias e infecciones.
Hasta hace unos años, la hemorragia constituía la principal causante de muerte materna en el país, seguido de preeclampsia y las infecciones, pero hoy esa realidad ha cambiado, pasando la hemorragia a ocupar el segundo lugar, siendo sustituida por la hipertensión.
El control de las hemorragias en parturientas se atribuye de una iniciativa global dirigida por la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia llamada “El Manejo Activo del Tercer Período del Parto”.
Esto consiste, explica José De Láncer, director de Salud Materno Infantil y Adolescente de Salud Pública, en colocar una inyección intramuscular de oxitocina a la madre tan pronto sale el hombro del bebé durante el parto o cesárea.
Explicó que la misma cuesta 10 ó 15 centavos y se estima que solamente haciendo eso en Latinoamérica iban a desaparecer 660 mil hemorragias por año.
En torno a la hipertensión dijo que aunque es más complicado se trabaja en su control, lo que implica mayor vigilancia de la consulta prenatal y conocimiento de parte de médicos, enfermeras y la madre de los signos de alarma.
Estos son la hinchazón de los pies y las manos, dolor en la boca del estómago, presión alta, orina con proteína.
Es una mujer que amerita reposo, más atención, tratamiento para evitar convulsiones, internamiento pésien salas no muy iluminada y sin ruido.
Dijo que se están haciendo capacitaciones a médicos, enfermeras y embarazadas sobre signos de alarma, y se está colocando el kit o caja de preeclampsia, en las emergencias y salas de parto, para que no se pierda tiempo en la atención. En muy agresivas de lavado de manos y capacitaciones en bioseguridad.
LogrosPara De Lancer la reducción de la tasa de mortalidad materna que registra el país no ha sido un suceso, sino un proceso fruto de la puesta en marcha de acciones contundentes, como es el caso del estudio de las causas, la aplicación de controles, la vigilancia y auditoria de cada muerte, la aplicación de sanciones, alianza con organizaciones entre otras aspectos.
Recordó que la OMS a finales del 2011 hizo un estudio que abarcó todos los países, y estableció que en República Dominicana está en 100 por 100 mil nacidos vivos, “o sea, 59 puntos por debajo, que endesa 2007”.
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