La muchacha, según vecinos que presenciaron la tragedia y algunos de los cuales, trataron de disuadir a la adolescente, dijeron que ella subió a la azotea, desde donde comenzó a gritar histérica como para llamar la atención.
La mayoría de los que observaron la chocante escena, pensaron que sólo se trataba de un “teatro” por parte de la jovencita. La uniformada detalló que agentes del cuartel 33, situado a una cuadra del edificio 2188 en la avenida Amsterdam y la calle 169, escena del suicidio, respondieron a una llamada al 911.
Los oficiales llegaron tarde al sitio, encontrando el cuerpo en el pavimento de la adolescente. Paramédicos del hospital Presbiteriano de la Universidad de Columbia, la ingresaron de emergencia al centro de salud, donde fue declarada muerta.
La policía dijo que la adolescente estaba inconsciente y no reaccionaba a los primeros auxilios de los paramédicos. La uniformada estableció suicidio en el caso y añadió que no hubo manos criminales.
La suicida residía en el edificio 506 de la calle 169.