"Antes, las computadora tenían teclados separados", le contarán los abuelos a los nietos, al arroparlos por la noche, en un futuro no muy lejano.
Y es que, de acuerdo con las empresas de análisis de tecnologías de la información, 2011 marcará el inicio del lento fin de las computadoras tradicionales, en favor de teléfonos inteligentes y tabletas electrónicas.La empresa IDC pronostica que, en cuestión de18 meses, las ventas combinadas de ambos dispositivos superarán las de las computadoras.
No hay que ir muy lejos para encontrar el razonamiento detrás de la predicción.
¿Los números no mienten?
IDC predice que este año se venderán más de 270 millones de teléfonos inteligentes en el mundo. Otra empresa de análisis de mercado, Gartner, afirma que en 2010 se habrán vendido 352 millones de computadoras y 19,5 millones de tabletas (incluyendo probablemente lectores de libros electrónicos).Llevemos el ejercicio al año entrante y las cosas se ponen interesantes. Los productos móviles alcanzarían más de 390 millones de unidades vendidas, frente a 400 millones de ordenadores adquiridos.
Pero no se trata sólo de mirar los números, también se puede leer la estrategia de las empresas tecnológicas.
Más que sólo ventas
Apple presentó este año una nueva MacBook Air, ultra delgada, ligera, con teclado, pero sin disco duro. De hecho la computadora se asemeja más a un iPad con teclas que a un computador normal.Google no se queda atrás. Chrome OS y Android son claras señales de que para la empresa el futuro es móvil.
Como sucede en las comparaciones entre los libros impresos y los textos electrónicos, es muy difícil decir que uno desaparecerá por completo.
A mucha gente le molesta no escribir en un teclado, aunque alternativas como "Swype", un teclado virtual que permite escribir sólo con arrastrar el dedo por las letras, pueden ser la puerta al cambio.
Lo que parece claro es que en 2011 las tabletas y los teléfonos inteligentes podrían comenzar a venderse igual o más que las computadora. En un lustro más podrían tener incluso un pedazo más grande del mercado a nivel mundial.