El buque Blue Emerald, con 306,997.18 barriles de naphtha (un derivado de petróleo) a bordo, abandonó el Santuario de Mamíferos Marino de la Bahía de Samaná la noche del miércoles, luego de que atracara en la zona "por desperfectos técnicos" y de que creara preocupación entre los habitantes y turistas que vistan la zona.
El Ministerio de Medio Ambiente había informado que el barco estaba en el área protegida sin su autorización y que no había declarado la carga que tenía.
Ayer, Peter Sánchez, administrador del Santuario, dijo a DL que por tales razones, el Departamento Legal de la institución prepaba un sometimiento a la naviera Báez y Ranik, empresa que según informó, remolcó el carguero hasta el santuario.
Sánchez sostuvo que la presencia del buque puso en peligro más de 700 ballenas jorobadas y otras especies marina del área, así como el turismo y el medio ambiente de Samaná.
Versión de la Marina
Sin embargo, la versión de Medio Ambiente difiere de la difundida ayer por la Marina de Guerra, que en una nota de prensa explica que el barco llegó hasta Samaná con su asistencia.
"...El barco matrícula IM9419723, salió de Texas, con destino a San Croix, pero cuando transitaba por el canal de La Mona sufrió desperfectos en la bomba inyectora de su máquina de propulsión, lo que la obligó a fondearse en la zona de Bávaro de manera forzosa".
La Marina agrega que al percatarse de la situación, coordinó la asistencia de un remolcador de alta mar a fin de movilizar la embarcación hasta Samaná.
La nota indica que el jefe de la Marina " comunicó la situación al ministro de Medio Ambiente, a quien le explicó los aspectos técnicos que limitaban el acceso del buque a puertos dominicanos y el riesgo que representaba movilizarlo del lugar en que se encontraba".