"El punto de vista oficial sigue siendo el que las
violaciones de los derechos humanos son cometidas por unos pocos
oficiales corruptos y nada profesionales", añade Zúñiga.
Entre enero y julio de 2011, 154 personas murieron
a manos de la policía en la República Dominicana, según la Fiscalía, en
comparación con los 125 en el mismo periodo de 2010.
Las estadísticas de la Fiscalía muestran que el
diez por ciento de todos los asesinatos contabilizados en 2010 fueron
cometidos por la policía, dice AI, que aclara que agentes del orden
también han perdido la vida.
La gran mayoría de los casos de muertes, agrega, se produjeron por un "intercambio de fuego" con sospechosos criminales.
Sin embargo, en muchos casos, las pruebas forenses apoyan las denuncias de que los agentes dispararon con la intención de matar.
Amnistía también informa de que los sospechosos de
actividades criminales fueron amenazados con la muerte y la privación
de alimentos mientras estaban en custodia policial.
Algunos de ellos tenían bolsas de plástico en la
cabeza, afirma la organización, que añade que son pocos los casos que
llegan ante la Justicia o son investigados.
"Reconocemos que los agentes suelen afrontar un
grave peligro mientras hacen su trabajo. No obstante, creemos que en
realidad su conducta hace recrudecer la violencia y crea un clima en el
que los derechos humanos son totalmente ignorados", añade Zúñiga.