Con espectacular precisión y sangre fría, miembros del ejérctio estadounidense eliminaron a los insurgentes afganos en su campamento, sin producir bajas colaterales.
La operación sorprende por la precisión y cuidado con que se realiza, al detener el fuego frente a las mujeres y los niños del campamento. Finalmente el ataque termina cuando los estadounidenses eliminan a todos los insurgentes.